lunes, 25 de marzo de 2013

EL RETORNO







Los párpados se contonean
bailando un encuentro de raíz
en la tierra anclada al alma.
El olfato, retoma el camino
de vuelta a la niñez, gastada.
Mientras el corazón ya disipa,
tras el cerro seco de agosto
tejados rojos, esquinas de cal
y balcones rebosando geranios.

¡Que es mi Andalucía madre!

Cantaba mi voz de chiquilla
hace ya, demasiados años.

¡Que llegamos madre, que llegamos!

Aparece el contorno
cálido, de mi pueblo blanco
cerrando las puerta al fin
de la distancia.
La amapola me mira
sudando calor de asfalto.
Las chumberas prestan
al costado del sol
amarillo y verde de antaño.

¡Que llegamos madre, que llegamos!

Alborota la tarde mi hija, calle abajo.

3 comentarios:

Mos dijo...

Qué bonito ste retorno, esta vuelta a la calidez de nuestras raíces.
Qué bonito sentir las mismas sensaciones de antaño y volver; volver para parar el tiempo y seguir siendo niña.
Un abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.

Sandra Garrido dijo...

Un canto sincero y sin tapujos, de tu memoria más lejana, de tu niñez, muy bonito .

Destaco :

La amapola me mira
sudando calor de asfalto.
Las chumberas prestan
al costado del sol
amarillo y verde de antaño.


un beso

Calma en días de tormenta (Darilea) dijo...

La memoria, siempre la memoria sobrevive al tiempo y al sentimiento.
Besitos