lunes, 28 de mayo de 2007

SIN RISAS PARA ENTREGAR


Se acabaron las ganas
justo en el umbral del latir.
Ni tan solo un suspiro
queda abierto a la esperanza.
Resurgir de entre cenizas
es fácil cuando el viento
levanta sin explicación
lo que ofrecías como hoguera.
Ni una sola brisa
rozará mi piel enmudecida
formando carias fingidas.
Ni una sola mano acogerá
la forma de mi gesto
como cuenco donde forjar
el sueño.
Se acabaron las ganas
de entregar risas
si de ti me llega un lamento.

2 comentarios:

Sandra Garrido dijo...

Chapó Maribel, diferente a lo que te acostumbro, pero me gusta, no es tan directo y sencillo, y así dejas al lecor con ganas de volver a leerlo y desenmascarar las metáforas....

Un abrazo
Sandra tk

Maribel Sánchez dijo...

Gracias Sandreta, hay más de estos irán apareciendo poco a poco.

Un abrazo de esos de boa niña. Si de algo me siento más que orgullosa es de saberte cerca.

Maribel